A un paso de hablar de los hasta ayer mismo compañeros de filas en el Partido Popular de Almería como “esos señores de los que usted me habla”, el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, intenta cercenar con medidas higiénicas de urgencia, buenas palabras y gestos de asombro lo que a todas luces se vislumbra como un caso de gangrena generalizada de su partido en la provincia almeriense, una de las fuentes electorales más importantes de la mayoría parlamentaria del PP en Andalucía y que ahora ve cómo las encuestas asoman a la extrema derecha como máxima competidora por el liderazgo en la provincia. El Juzgado de Instrucción número 1 de Almería suma ya 17 personas investigadas, desde altos cargos del PP almeriense, familiares, funcionarios y empresarios, por diversos delitos relacionados con mordidas en compras de material sanitario durante la pandemia y también en contrataciones públicas.
Al mismo tiempo que Juan Aureliano García y su número dos en la Diputación Provincial de Almería, Fernando Giménez, han dimitido de sus cargos en la corporación provincial tras ser expulsados del partido, el PP andaluz se afana en blanquear un caso judicial de presunta corrupción generalizada entre altos cargos del partido almeriense. El secretario general de los populares en Andalucía, Antonio Repullo, y el nuevo presidente del PP de Almería y también consejero de Agricultura de la Junta, Ramón Fernández-Pacheco, han reunido este viernes a los medios de comunicación en la capital almeriense para informar de los cambios en la cúpula del partido en la provincia después de que la segunda ofensiva judicial del caso Mascarillas de Almería haya sacado a la luz un presunto entramado criminal de mordidas y adjudicaciones irregulares de obras públicas, en las que también está investigado, además de familiares, el alcalde popular de Fines, Rodrigo Torres, que por el momento mantiene su cargo de alcalde del municipio aunque ha sido ya suspendido de militancia en el PP.
Repullo ha sido tajante al asegurar que el PP “es un partido serio, que ha hecho mucho por esta provincia”. Actualmente, los populares gobiernan en más de 60 municipios de los 103 que posee la provincia almeriense. El secretario general del PP andaluz ha asegurado que su formación ha asumido “con total normalidad una situación que no es deseable” y ha actuado con “transparencia” y “responsabilidad” al cesar de sus cargos en la ejecutiva del partido al ya ex presidente de la Diputación de Almería. Por su parte, el nuevo líder del partido en la provincia comienza a hablar en pasado y sin nombrarlos de sus ya ex compañeros de filas. “Todos estamos muy afectados, son dos personas (el ex presidente y el ex vicepresidente de la Diputación) que han sido muy importantes en esta organización. Confío en que puedan demostrar su inocencia”, ha añadido Fernández-Pacheco.
Secretario general del PP andaluz: “Somos un partido que ha hecho mucho por Almería”
Durante toda la rueda de prensa ha estado sentado en primera fila el que hasta hace poco ha sido sin duda el alma central del PP almeriense durante décadas: Gabriel Amat, actual regidor de Roquetas de Mar. Precisamente el juez que investiga el caso Mascarillas de Almería ha retrotraído sus investigaciones del caso hasta el año 2016, fecha en la que Amat era máximo responsable de la Diputación almeriense y presidente del partido en la provincia andaluza. De hecho, el alcalde de Roquetas de Mar fue presidente de la Diputación entre los años 2011 y 2018 y principal responsable provincial del partido desde el lejano 2004 hasta el año 2021. Cedió precisamente el testigo de ambas responsabilidades al hoy investigado por la justicia Juan Aureliano García.
Cuatro días después de que estallara la segunda parte del caso judicial que se inició en 2021, Moreno Bonilla ya no se hace tanto el sorprendido por lo sucedido en su partido en Almería y comienza a reencarnar el rictus mientras saca pecho cuando dice que ya ha puesto la casa en orden. Mismo modus operandi que cuando estalló el escándalo sanitario de los cribados fallidos del cáncer de mama a finales de septiembre: ceses de altos cargos, reorganización del equipo y aquí no ha pasado nada, a otra cosa, mariposa.