Los alimentos básicos disparan los precios

A pesar de que el IPC se ha moderado, los alimentos se encarecen como es el caso de los huevos que se han disparado un 60%

12 de Diciembre de 2025
Actualizado a las 11:43h
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Huevos alimentos
Foto: Pixabay

El Índice de Precios de Consumo (IPC) frenó ligeramente su ritmo en noviembre y se situó en el 3 % interanual, una décima menos que en octubre, impulsado por el abaratamiento de la electricidad. Sin embargo, este respiro en la cesta general convive con un dato especialmente sensible para los hogares españoles: la inflación de los alimentos volvió a repuntar y alcanzó el 2,8 %, cuatro décimas más que el mes anterior, debido al encarecimiento de productos básicos como aceites y grasas, leche, queso y huevos.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó este viernes los datos adelantados hace dos semanas y señaló, además, que la inflación subyacente subió hasta el 2,6 %, su nivel más alto desde diciembre de 2024. Este incremento prolonga una tendencia de cinco meses consecutivos al alza, con la única excepción de septiembre.

La moderación del IPC general se explica principalmente por la evolución del grupo de vivienda, cuya tasa anual cayó hasta el 5,7 % tras reducirse 1,8 puntos respecto a octubre, gracias al descenso de los precios de la electricidad, que contrasta con la subida registrada en noviembre de 2024. En sentido opuesto, el sector de ocio y cultura mostró una tasa anual del 1,2 %, más de un punto superior a la del mes anterior, debido a una menor caída en los precios de los paquetes turísticos frente al año pasado.

El grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas, sin embargo, fue el que más presión ejerció al alza sobre el IPC. El encarecimiento de los aceites y grasas, la fuerte subida de la leche, el queso y los huevos contribuyó a elevar la inflación alimentaria hasta niveles que vuelven a preocupar. De hecho, los huevos son ya el producto que más ha subido en la cesta de la compra, con un aumento interanual del 30 %, seguidos por la carne de vacuno (18 %), el café (17,3 %), otros aceites comestibles (17 %) y el chocolate (14,5 %). También repuntaron de forma notable el pescado fresco, las frutas, los frutos secos y la carne de ovino y caprino.

En contraste, el aceite de oliva registró la mayor bajada interanual del mes, con un descenso del 38,1 %, aunque sigue acumulando una subida del 57,7 % desde enero de 2021. Otros alimentos que abarataron sus precios fueron el azúcar, las patatas y productos preparados como la pizza o la quiche.

Fuera del ámbito alimentario, los mayores incrementos se dieron en la recogida de basura (30,3 %), la joyería y bisutería (29,6 %), el transporte combinado de pasajeros (26,7 %) y la propia electricidad (11,9 %). En el extremo opuesto, los equipos audiovisuales, los vuelos internacionales, las cocinas y los artículos de juegos y aficiones registraron las caídas más significativas.

En términos mensuales, los precios subieron un 0,2 % respecto a octubre. Destacó la subida de los huevos, que aumentaron un 6,8 % en solo un mes, además del encarecimiento del transporte marítimo de pasajeros. Por el contrario, los precios de hoteles, hostales y pensiones se desplomaron un 10,6 % tras el final de la temporada alta. La nueva campaña de invierno impulsó los precios del vestido y calzado, mientras que la subida de los carburantes encareció el transporte.

Todas las comunidades autónomas registraron tasas positivas de IPC, con Madrid (3,7 %) y Comunidad Valenciana (3,4 %) a la cabeza, y Canarias (2,3 %) y La Rioja (2,4 %) como las regiones con menor inflación. En paralelo, el IPCA, que permite comparar la inflación entre países de la Unión Europea, se mantuvo estable en el 3,2 % y no experimentó variación mensual.

Con estos datos, noviembre dibuja un escenario mixto: mientras la inflación general ofrece un ligero alivio, la persistencia del encarecimiento de alimentos esenciales mantiene la presión sobre los hogares y condiciona las perspectivas económicas de cara al final del año.

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