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Gaza nos ha quitado la venda de los ojos

10 de Octubre de 2025
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Unos niños recogen agua en el norte de Gaza. | Foto:  UNOCHA/Olga Cherevko
Unos niños recogen agua en el norte de Gaza. | Foto: UNOCHA/Olga Cherevko

La primera parte del artículo corresponde a unas reflexiones del Sr.Llamas en torno a todos los acontecimientos de la guerra de Israel, creado como Estado en 1948, los británicos empezaron a retirar sus fuerzas en abril de 1948. Los líderes sionistas se prepararon entonces para establecer formalmente un estado judío moderno. El 14 de mayo de 1948, David Ben-Gurion anunció la formación del estado de Israel.

El Estado de Israel no fue creado por países, sino que surgió de un plan de partición de la ONU en 1947, apoyado por potencias como Estados Unidos y la Unión Soviética, y fue proclamado por el movimiento sionista en 1948, aunque los estados árabes cercanos lo rechazaron y se enfrentaron en la Guerra árabe-israelí de 1948. 

Proceso de creación

En 1947, la Asamblea General de la ONU votó a favor de la Resolución 181, que proponía dividir el territorio de Palestina en dos estados: uno árabe y otro judío, con un estatus especial para Jerusalén. La resolución fue aprobada con el apoyo de Estados Unidos, la Unión Soviética y la mayoría de los países latinoamericanos, aunque el Reino Unido se abstuvo de votar. 

David Ben-Gurión, líder del movimiento sionista, proclamó la fundación del Estado de Israel el 14 de mayo de 1948, tras la retirada de las últimas tropas británicas. La propuesta de partición fue rechazada por los árabes y el movimiento sionista la aceptó, llevando a la guerra. Inmediatamente después de la declaración de independencia, los ejércitos de Egipto, Jordania, Siria, Líbano e Irak invadieron el territorio recién marcado, marcando el inicio de la guerra. 

 Israel logró vencer a las fuerzas árabes y ocupó más territorio del que se había asignado en el plan de partición de la ONU. Está guerra como la actual ha sido apoyada por el país de los yankees de Donald Trump para ponerlo como parapeto ante el posible avance del pueblo musulmán.

El Sr. Llamas dice lo siguiente<<El genocidio perpetrado impunemente en Gaza por Israel, un artefacto colonial creado por Occidente para controlar Oriente Medio, nos ha mostrado la verdadera faz del mundo. No vivimos en un mundo democrático, sino en una gigantesca telaraña tejida por las elites económicas. Los gobiernos salidos de las urnas no representan a los ciudadanos, sino a los grandes grupos empresariales que explotan y destruyen el planeta para obtener beneficios. El verdadero poder está en manos de bancos, constructoras, fondos de inversión, compañías de petróleo, armas, gas, carbón, electricidad, energía nuclear, fármacos o redes de comunicación. La destrucción de Gaza no obedece sólo al propósito de crear un Gran Israel, sino a intereses comerciales que se intentan ocultar: explotar grandes yacimientos de gas, crear un corredor comercial que compita con la nueva ruta de la seda china, construir el canal Ben Gurion para sustraer tráfico marítimo al canal de Suez, buscar petróleo en un región que -según un informe del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS)- podría  albergar grandes recursos aún no descubiertos de petróleo. EEUU y sus aliados estiman que en las costas de Gaza podrían extraerse 1.700 millones de barriles de petróleo y 3.452 millones de metros cúbicos de gas natural. Ninguna empresa quiere implicarse en la explotación de la zona (sería mejor decir saqueo) sin grandes márgenes de seguridad. La inestabilidad generada por "el problema palestino" es un argumento altamente disuasivo. Por lo tanto, hay que buscar "una solución final". Si no es posible una limpieza étnica por culpa de las protestas internacionales, reducir al menos a la impotencia al pueblo palestino, tal como pretende el "plan de paz" de Trump. 

Los gobiernos están al servicio de las grandes empresas. Esa es la realidad. Lo demás solo es retórica. Ese trágico hecho explica que intelectuales como Toni Negri llegaran a justificar la insurrección armada. Sin embargo, ya sabemos que ese camino sólo lleva a la derrota de los pueblos y a la degradación moral de los que empuñan las armas. La violencia nunca es liberadora. Solo deshumaniza al que la ejerce. No es extraño que muchas revoluciones hayan desembocado en tiranías. ¿Qué se puede hacer entonces? 

Pienso que la desobediencia civil no violenta es la única alternativa fructífera. Es una estrategia a largo plazo que exige liderazgo moral y una ciudadanía movilizada. El 15M fue una hermosa explosión de rebeldía, pero la lucha de egos y la irresponsabilidad de los que reivindicaron ese brote de rebeldía malograron su potencial transformador. Si la izquierda democrática no logra vencer sus divisiones y surgen figuras con la dignidad y valentía de Marcelino Camacho, el porvenir se escribirá con sangre, sudor y lágrimas. La campaña de Trump contra la democracia se extenderá por todo el mundo y las grandes empresas reforzarán su poder, aliadas con autócratas sin escrúpulos. Los ciudadanos sólo serán variables prescindibles, peones sin importancia que oscilarán entre el escepticismo, el embrutecimiento y la rabia. 

Peones que, por supuesto, se podrán sacrificar, como ahora está sucediendo en Gaza. Lo que hoy está pasando en Palestina, podría repetirse en cualquier lugar del planeta, incluidos los países que muchos consideran inviolables. No hay zonas de confort indestructibles en un mundo gobernado por el capital>>.

En el trasfondo de la Guerra contra Palestina subyace la diferencia entre capitalismo y socialismo, en su amplio sentido el comunismo, la cuál exponemos sucintamente en este artículo:

¿Cuál es la diferencia entre el capitalismo, el socialismo y el comunismo?

La principal diferencia es que el capitalismo se basa en la propiedad privada de los medios de producción y la libertad de mercado para asignar recursos, buscando la generación de ganancias y la competencia. En contraste, el socialismo promueve la propiedad colectiva o estatal de los medios de producción y la planificación centralizada para una distribución más equitativa de la riqueza y la reducción de la desigualdad. 

En el Capitalismo: Los medios de producción (fábricas, tierras, etc.) son propiedad privada de particulares.  La asignación de recursos y la fijación de precios se determinan por las leyes de la oferta y la demanda en un mercado libre. 

El objetivo es generar ganancias a través del capital y la inversión, lo que puede impulsar la innovación y la creación de empleos. El estado tiene una mínima intervención, enfocándo se en garantizar el cumplimiento de las leyes y los derechos de propiedad. Prioriza la libertad individual y la iniciativa privada. 

En el Socialismo: Los medios de producción son propiedad de la sociedad, usualmente a través del Estado. La producción y distribución de bienes se planifican y controlan por el Estado para satisfacer las necesidades sociales. El objetivo es lograr una distribución más equitativa de la riqueza y crear una sociedad sin clases sociales y con mayor igualdad. El Estado interviene activamente en la economía, regulando la producción, los precios y distribuyendo los recursos. Priorizando la igualdad y el bienestar común. Mientras el capitalismo se enfoca en la propiedad y el mercado, el socialismo se enfoca en la comunidad y la planificación estatal para un objetivo más igualitario. 

El sistema económico comunista fue oficialmente nombrado como el objetivo final del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) en su plataforma de partido. Según el Programa de 1986 del PCUS.

El comunismo es un sistema social sin clases con una forma de propiedad pública de los medios de producción y con la plena igualdad social de todos los miembros de la sociedad. Bajo el comunismo, el desarrollo integral de las personas estará acompañado por el crecimiento de las fuerzas productivas sobre la base del progreso continuo en la ciencia y la tecnología, todos los manantiales de la riqueza social fluyen abundantemente, y el gran principio "De cada uno según su capacidad, a cada uno según sus necesidades" será implementada. El comunismo es una sociedad altamente organizada de trabajadores libres y socialmente conscientes, una sociedad en la que se establecerá el autogobierno público, una sociedad en la que el trabajo por el bien de la sociedad se convertirá en el principal requisito vital de todos, una necesidad claramente reconocida, y la capacidad de cada persona se empleará para el mayor beneficio de las personas.

La base material y técnica del comunismo presupone la creación de aquellas fuerzas productivas que abren oportunidades para la plena satisfacción de los requisitos razonables de la sociedad y del individuo. Todas las actividades productivas bajo el comunismo se basarán en el uso de instalaciones y tecnologías técnicas altamente eficientes, y se garantizará la interacción armoniosa del hombre y la naturaleza.

En la fase más alta del comunismo, el carácter social directo del trabajo y la producción quedará firmemente establecido. Mediante la eliminación completa de los remanentes de la antigua división del trabajo y las diferencias sociales esenciales asociadas con ella, se completará el proceso de formación de una sociedad socialmente homogénea.

El comunismo significa la transformación del sistema de autogobierno socialista por parte del pueblo, de la democracia socialista en la forma más alta de organización de la sociedad: el autogobierno público comunista. Con la maduración de las pre condiciones socioeconómicas e ideológicas necesarias y la participación de todos los ciudadanos en la administración, el estado socialista, dadas las condiciones internacionales adecuadas, se convertirá, como señaló Lenin, en una forma de transición "de un estado a un no estado". Las actividades de los organismos estatales serán de naturaleza no política, y la necesidad del estado como institución política especial desaparecerá gradualmente.

Rasgo inalienable del modo de vida comunista es el alto nivel de conciencia, participación social, disciplina y autodisciplina de los miembros de la sociedad, con el cual la observancia de las normas únicas, universalmente aceptadas, de la convivencia comunista se convierte en necesidad interna y costumbre de cada individuo.

El comunismo es un sistema social bajo el cual el libre desarrollo de cada uno es una condición para el libre desarrollo de todos.

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