El mercado laboral madrileño vuelve a mostrar signos de inestabilidad. En octubre, el paro registrado aumentó en 2.281 personas, según los datos del Ministerio de Trabajo. Para UGT Madrid, se trata de “una mala noticia” que confirma los continuos vaivenes del desempleo en la región y la fragilidad de su mercado laboral, muy dependiente de factores coyunturales y temporales.
A lo largo de los últimos doce meses, el paro en la Comunidad de Madrid solo se ha reducido en 11.737 personas, una cifra insuficiente para un territorio con más de seis millones de habitantes y que concentra gran parte de la actividad económica del país. Mientras que en el conjunto de España el paro bajó un 6% anual, en Madrid solo lo hizo un 4%, lo que evidencia una evolución más lenta y errática.

Un mercado de trabajo inestable y desigual
El análisis de los datos refleja un panorama preocupante. El paro ha subido en enero, febrero, marzo, julio, agosto y octubre, lo que para UGT Madrid muestra un patrón de altibajos que impide consolidar un crecimiento sostenido del empleo.
En total, 280.337 personas buscan trabajo en la Comunidad de Madrid. De ellas, seis de cada diez son mujeres, lo que subraya la persistencia de la brecha de género en el acceso al empleo. Además, el sindicato destaca que la mayoría de las nuevas inscripciones en octubre corresponden a menores de 25 años, un grupo que sigue sufriendo altos niveles de temporalidad y precariedad.
“Estamos ante un mercado laboral que expulsa a los jóvenes y mantiene a las mujeres en la desigualdad, con sectores muy marcados por el género”, ha señalado Isabel Vilabella Tellado, secretaria de Formación, Empleo y Memoria Democrática de UGT Madrid.
El sindicato apunta que este mes las mujeres han tirado del empleo en el sector educativo, coincidiendo con el inicio del curso escolar, mientras que los hombres extranjeros han sostenido la contratación en la construcción. Una tendencia que, según Vilabella, “refuerza los sesgos de género y segmenta el mercado laboral”.
Menos contratos indefinidos y menor protección
Otro dato negativo es la caída de los contratos indefinidos, que rompe una tendencia positiva iniciada tras la reforma laboral. La contratación estable retrocede mientras crecen los contratos temporales y a tiempo parcial, lo que aumenta la inseguridad laboral.
A esto se suma la reducción de 20.463 personas que han dejado de cobrar prestaciones por desempleo, una cifra que deja la tasa de cobertura en solo el 55%. En otras palabras, casi la mitad de las personas en paro no recibe ningún tipo de ayuda pública.
Para UGT Madrid, esta situación es “insostenible” y refleja la falta de una red de protección suficiente para quienes más lo necesitan. “No podemos normalizar que decenas de miles de personas en paro queden sin ingresos mientras el mercado laboral se vuelve cada vez más inestable”, subraya Vilabella.
Un dato positivo: más afiliaciones a la Seguridad Social
No todo son malas noticias. El número de personas afiliadas a la Seguridad Social en la Comunidad de Madrid creció en 102.136 en el último mes. Este aumento, según UGT, revela que se está generando empleo, aunque de manera intermitente y sin suficiente estabilidad.
El sindicato considera que esta mejora no compensa los problemas estructurales de fondo: la temporalidad, los contratos de corta duración y los bajos salarios. “No basta con crear empleo; hay que crear empleo de calidad y con derechos”, insiste Vilabella.
Reducir la jornada laboral ayudaría a crear empleo estable
Ante este escenario, UGT Madrid lanza un mensaje claro: es urgente adoptar medidas que estabilicen el empleo y reduzcan los vaivenes del paro. Una de las propuestas clave es la aplicación de la reducción de la jornada laboral, una medida que el sindicato considera esencial para repartir el trabajo existente, mejorar la productividad y aumentar la calidad de vida de las personas trabajadoras.
“La reducción de la jornada laboral sin pérdida de salario sería una herramienta eficaz para generar nuevos empleos y consolidar los existentes, especialmente en sectores con alta rotación o temporalidad”, explica la secretaria de Formación y Empleo.
UGT Madrid insiste además en reforzar las políticas activas de empleo, la formación profesional y la inspección laboral, para garantizar que se cumplan los derechos laborales y se limite el abuso de la temporalidad.
Llamamiento a la responsabilidad política y empresarial
El sindicato apela también a la responsabilidad de las empresas y de las administraciones públicas. Considera imprescindible una política económica y laboral más estable, que combine el crecimiento con la equidad y la sostenibilidad social.
“La Comunidad de Madrid necesita un modelo productivo menos dependiente de sectores volátiles como el turismo o la construcción, y más orientado hacia la industria, la innovación y los servicios públicos de calidad”, afirma Vilabella.
Para UGT Madrid, el empleo no puede depender exclusivamente de coyunturas estacionales o del ciclo escolar. La región, sostienen, requiere una estrategia a largo plazo que garantice estabilidad y derechos laborales, especialmente para las mujeres, los jóvenes y las personas con más dificultades de inserción.