El próximo 26 de noviembre, la sala Vesta de Madrid se convertirá en el epicentro de una noche donde la electrónica y la emoción se funden en un solo pulso. Los Eclipses, el dúo formado por la enigmática cantante francesa Eva de Marce y el productor mexicano Dan Solo, aterrizan en la capital para presentar su nueva gira, “Éden Sauvage”, un viaje sonoro que invita a perderse entre la luz y la sombra.
Su propuesta, tan hipnótica como bailable, ha ido conquistando escenarios desde México hasta Europa, pasando por festivales donde la crítica los ha definido como una de las revelaciones más singulares de la electrónica contemporánea. Entre sintetizadores envolventes y letras que oscilan entre el deseo y la introspección, el dúo consigue una alquimia rara: hacer de la melancolía un motivo de celebración.
“Éden Sauvage”, además de ser el título de su gira, es también el nombre de su último trabajo discográfico, una obra que explora la tensión entre lo salvaje y lo etéreo, lo íntimo y lo colectivo. En escena, la fuerza de Eva de Marce —mitad musa, mitad hechicera— se combina con la precisión de Dan Solo, tejedor de beats y atmósferas que remiten tanto a la nostalgia ochentera como a la vanguardia del house actual.
Con esta gira, Los Eclipses consolidan su presencia en el panorama internacional tras haber compartido escenario con artistas como Empire of the Sun, Polo & Pan, Whitest Boy Alive, Underworld o Delaporte. En España, además de su cita madrileña, el dúo ofrecerá conciertos en Valencia (27 de noviembre, Loco Club) y Barcelona (28 de noviembre, Casa Elizalde).
Las entradas estarán disponibles desde mañana viernes 26 de septiembre a las 12:00h en planetevents.es, livenation.es y Ticketmaster, aunque los fans más impacientes podrán acceder desde hoy a la preventa exclusiva en SMusic y planetevents.es.
“Queremos que cada concierto sea un estado mental, un eclipse emocional donde nada sea del todo claro, ni oscuro”, ha dicho el dúo en una reciente entrevista. Quizá por eso su música atrapa: porque entre sus luces y sombras, Los Eclipses logran que el público se mire, por un instante, en su propio resplandor.
