El viernes estaba invitado a un estreno y el sábado a un concierto. El estreno era en los cines Golem, antiguos Alphaville, me gusta decirlo siempre, y la película era LA LEY DE SODOMA dirigida por Rafael Gordon.
El concierto del sábado era en un bar restaurante de zarzalejo, la Parada. Tocaba Planta Baja.
Al estreno me invitó Arantxa de Juan, aunque también me habían llegado mensajes avisándome de Ramón García del Pomar.
La película, en blanco y negro, está basada en una obra teatral, se puede conseguir el libro, que publicó Huerga y Fierro, del propio Rafael Gordon. Cuatro actores en un juzgado imaginario. El tema no puede ser más oportuno dada la no demasiado deseable fama que están alcanzando ciertas figuras del mundo jurídico en la actualidad española.
Los actores, los dos citados anteriormente y sus compañeros Santiago Trancón y Víctor Rivas, están magníficos.
Y magnífico era también quien escuchaba, porque entre el público había editores, grandes actores y figuras del mundo del espectáculo (no especifico nombres para que no se ofenda nadie si se me olvidase alguno). Pero de eso va este artículo, del público, de quien está escuchando mientras otro habla. Y en este caso quien escuchaba era Arantxa de Juan, y yo la grabé, la filmé, sin que se diera cuenta mientras escuchaba. El resultado es una peliculita de cuatro minutos que me encanta y cuyo enlace dejaré al final de este artículo para que pueda verlo quien quiera. Es también una vuelta de tuerca en el arte cinematográfico, como comprobará quien vea los cuatro minutos mencionados.
Y el sábado, en el concierto de Planta Baja en Zarzalejo, hice lo mismo. En un determinado momento me centré únicamente en Iñaki Orbe, el Gran Iñako (como lo llama el caballero, señor, Castillo Blanco, Herminio Castillo Blanco).
El concierto también fue una experiencia maravillosa e irrepetible. Parecía que estábamos dentro de Twin Peaks y que David Lynch nos estaba filmando a todos. Y luego el regreso a Mad Madrid, atravesando la densa niebla, fue también inolvidable, pero esa es otra historia.
Planta Baja es un grupo que alterna temas conocidos y de éxito garantizado con otros compuestos por el líder del grupo: Solomon Zú, de quién soy seguidor incondicional y absoluto. Espero conseguir que en breve actúen en uno de los locales más míticos de Madrid, y si lo consigo ya lo pondré aquí, en este periódico, para que se entere el máximo número de personas posibles.
Dejo aquí los dos enlaces a los dos vídeos. Una actriz, gran actriz, escuchando, y un músico, un percusionista, escuchando.
Excelsior.