El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha solicitado a la Unión Europea que le proporcione apoyo financiero estable durante “dos o tres años” más para hacer frente a la invasión rusa, en unas declaraciones realizadas este martes en las que también expresó su confianza en que Donald Trump presione a China para reducir su respaldo a Moscú.
“Enfaticé de nuevo este punto a todos los dirigentes europeos. Les dije que no vamos a combatir durante décadas, pero deben mostrar que, por un tiempo, podrán suministrar apoyo financiero estable a Ucrania”, declaró Zelenski en un briefing al que asistió la agencia AFP, según informó Le Monde. “Es por eso que tienen en mente este programa, dos o tres años”, añadió el mandatario ucraniano en referencia a la propuesta de la Comisión Europea de descongelar gradualmente activos rusos para financiar el esfuerzo de guerra. Una propuesta que acaba de quedar paralizada hasta el próximo mes de diciembre, al no llegar los líderes europeos a un acuerdo la pasada semana en la cumbre celebrada.
Las declaraciones de Zelenski llegan en un momento crítico para las finanzas ucranianas. Según el ministro de Hacienda ucraniano, Sergiy Marchenko, el país necesitará aproximadamente 60.000 millones de dólares en financiación externa durante 2026-2027 para cubrir su déficit presupuestario. Diversas fuentes estiman que las necesidades presupuestarias y militares de Ucrania para estos dos años ascienden a alrededor de 153.000 millones de dólares.
El controvertido préstamo de reparaciones
La Unión Europea está trabajando en un ambicioso plan para otorgar a Kiev un “préstamo de reparaciones” de 140.000 millones de euros utilizando los activos rusos congelados, una cifra que representa parte de los aproximadamente 200.000 millones de euros en fondos soberanos del Kremlin inmovilizados en territorio europeo tras la invasión de Ucrania en febrero de 2022. De esta cantidad total, unos 185.000 millones se encuentran en manos de Euroclear, la cámara de compensación belga.
El presidente del Consejo Europeo, António Costa, prometió a Zelenski una “decisión política” europea para garantizar las necesidades financieras de Ucrania hasta 2026 y 2027. “Hoy tomaremos la decisión política de garantizar las necesidades financieras de Ucrania para 2026 y 2027. Los detalles técnicos continuaremos trabajando con la Comisión Europea, pero lo más importante es la decisión política y el mensaje claro que estamos enviando a Rusia”, declaró Costa el pasado 22 de octubre.
Sin embargo, el plan se enfrenta a importantes obstáculos. En la cumbre europea celebrada la semana pasada en Bruselas, Bélgica bloqueó el acuerdo al exigir que todos los países compartan los riesgos legales y financieros de la medida. El primer ministro belga, Bart De Wever, expresó abiertamente sus reservas y exigió una “mutualización completa del riesgo”, advirtiendo sobre posibles represalias del Kremlin: “Si queremos dárselos a Ucrania, tenemos que hacerlo todos juntos. Si no, las represalias rusas podrían afectar solo a Bélgica. Eso no es muy razonable”.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, defendió que el mecanismo cuenta con un “fundamento legal sólido” y recalcó que “Rusia es el agresor, ha causado el daño y debe rendir cuentas”. Von der Leyen insistió en que “no estamos confiscando los activos, sino que estamos tomando los saldos de efectivo para un préstamo a Ucrania” que Kiev solo debería devolver en el caso de que Rusia pusiera fin a la guerra y abonara las reparaciones correspondientes por los daños causados.
Ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo definitivo, los líderes europeos decidieron posponer cualquier decisión concluyente y trasladaron a la Comisión Europea la tarea de presentar nuevas “opciones de apoyo financiero” lo antes posible para la agenda del próximo Consejo Europeo, previsto para diciembre.
Situación crítica en el frente
Las peticiones de Zelenski se producen mientras la situación militar se deteriora en el este de Ucrania, particularmente en Pokrovsk, ciudad estratégica del óblast de Donetsk que lleva más de un año resistiendo un asedio ruso. El presidente ucraniano confirmó que aproximadamente 200 soldados rusos se encuentran actualmente dentro de la ciudad.
El 7º Cuerpo de las Fuerzas de Asalto de Ucrania reconoció que “las batallas urbanas continúan con grupos enemigos que, gracias a su superioridad numérica, lograron infiltrarse en la ciudad y acumularse en distintas zonas de la misma”, aunque precisó que “actualmente, el enemigo no tiene control total sobre ninguno de los distritos” de la ciudad.
A pesar de los avances rusos en algunas zonas, las fuerzas ucranianas han logrado recuperar territorio en otros sectores. Según el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania, “al 26 de octubre de 2025, los soldados ucranianos liberaron 185,6 kilómetros cuadrados y limpiaron 243,8 kilómetros cuadrados del territorio del distrito de Pokrovsk”.
Presión sobre China y sanciones a Rusia
Zelenski también expresó su esperanza en que Trump presione al presidente chino, Xi Jinping, para que Pekín reduzca su apoyo a Moscú y sus importaciones de hidrocarburos rusos durante el encuentro previsto entre ambos mandatarios.
Las sanciones impuestas la semana pasada por Washington contra dos grandes grupos petroleros rusos, Rosneft y Lukoil, representan el 55% de la producción petrolera rusa. Como consecuencia de estas sanciones, Lukoil anunció este lunes su intención de vender sus activos internacionales.
El mandatario ucraniano también celebró el decimonoveno paquete de sanciones de la UE contra Rusia, dirigido principalmente al sector energético y a la llamada “flota fantasma” usada por Moscú para evadir embargos petroleros. “El decimonoveno paquete es muy importante, pero las sanciones estadounidenses también lo son y esta es una buena señal para que otros países del mundo se unan a las sanciones”, declaró Zelenski.
Respecto al uso de los fondos que eventualmente reciba, Zelenski fue claro: “Si la guerra termina en un mes, gastaremos este dinero en la recuperación. Si no termina en un mes, sino después de un tiempo, lo gastaremos en armas. Simplemente, no tenemos otra opción”.